Más de un mes después de celebrarse las elecciones presidenciales de Estados Unidos, YouTube anunció el miércoles que empezará a eliminar material recién cargado en su plataforma en el que se asegure que hubo fraude electoral a gran escala o errores que modificaron los resultados.
El servicio de video propiedad de Google señaló que la acción coincide con la manera en que ha lidiado con la información falsa en elecciones pasadas. Eso se debe a que el martes vencía el plazo de “lugar seguro” para las elecciones y YouTube dijo que suficientes estados han certificado sus resultados para determinar al demócrata Joe Biden como el ganador de los comicios.
Pero estas elecciones fueron distintas a las demás y YouTube ha sido sumamente criticado por no tomar medidas adicionales para evitar la propagación de información falsa en su plataforma. A diferencia de Twitter y Facebook, que implementaron restricciones que tuvieron algo de éxito, YouTube se había mantenido hasta el miércoles con su decisión de mantener las afirmaciones infundadas sobre fraude electoral en su sitio.
No existen pruebas de que haya habido un fraude a gran escala en los comicios de 2020. Las autoridades electorales confirmaron que no se registraron irregularidades importantes y que las elecciones se llevaron a cabo de buena manera. El secretario de Justicia William Barr dijo la semana pasada que el Departamento de Justicia no ha identificado un fraude electoral que cambiaría los resultados en los comicios.
Eso no ha impedido que el presidente Donald Trump y sus simpatizantes afirmen que hubo fraude en el proceso. Los sitios noticiosos conservadores y las cuentas de Twitter han sido una herramienta para propagar esas declaraciones, como un video de 90 segundos de duración grabado con un teléfono que mostraba a un hombre cerrando las puertas de una camioneta blanca y luego llevar una carretilla con una caja grande a un centro electoral de Detroit. Pretendía mostrar actos de fraude, pero fue desacreditado rápidamente por los medios de comunicación y funcionarios públicos. El hombre era un fotoperiodista que llevaba equipo fotográfico, no papeletas ilegales.
Sin embargo, el daño ya estaba hecho y la grabación reafirmó la creencia de algunos en torno a que el proceso estuvo manchado por fraude e irregularidades.
YouTube dijo que trata de tener un equilibrio entre “permitir una amplia variedad de discurso político y garantizar que no abusen de nuestra plataforma para incitar a la agresión o propagar información falsa”.