Wisconsin a punto de sobrepasar la tercera noche de violentas protestas por el presunto abuso policial a un hombre negro residente de Kenosha (EEUU). Ante esto, el gobernador de Wisconsin, Tony Evers, declaró el estado de emergencia en el estado.
Además, Evers aseguró que desplegaría más tropas de la Guardia Nacional del estado para cumplir el orden y contrarrestar los saqueadores y priómanos infiltrados en las manifestaciones. De hecho, se han registrado incotables daños a edificios públicos y empresa durante las anteriores noches.
Por el contrario, la familia del hombre negro baleado, identificado como Jacob Blacke, baleado realizó una emotiva defensa del valor de la vida de su hijo este martes. En una coferencia de prensa el padre de Blake pidió el fin de las violentas protestas que estallaron en la ciudad.
Le dispararon a mi hijo siete veces. ¡Siete veces! Como si no importara. [dijo Jacob Blake Sr]. Mi hijo importa. Es un ser humano e importa.
El pasado domingo, Blake estaba tratando de separar a dos mujeres que peleaban y producto de aquello fue baleado por la policía con siete disparos. Según medios locales, el hecho sucedió a la vista de sus tres hijos pequeños.
Fuente | Reuters/El Mundo