Vietnam registra su primera muerte por coronavirus

En menos de una semana Vietnam ha pasado de la despreocupación y el orgullo de haber superado la pandemia de la COVID-19 sin víctimas mortales a vivir su peor oleada. Hasta este viernes registra decenas de contagios comunitarios y su primera muerte por coronavirus.

Según informó el comité especial de gestión del virus, el primer paciente fallecido en Vietnam por coronavirus desde el inicio de la pandemia es el paciente 428 de los 545 contagios confirmados. Un hombre de 70 años residente en Hoi An, una localidad turística cercana a Danang, epicentro de esta nueva oleada.

Aquejado de una grave insuficiencia renal, problemas cardíacos y neumonía, fue trasladado el jueves a una clínica de Hue desde el hospital de Danang, donde había estado ingresado desde el 9 de julio sin que se le realizara la prueba de detección del virus hasta esta semana.

El anuncio del fallecimiento ha sacudido a la población de Vietnam, que lucía orgullosa la estadística de cero muertes por coronavirus. Este país tiene 96 millones de habitantes y estuvo expuesto a la epidemia desde muy pronto por su cercanía geográfica y comercial con China.

CONTAGIO COMUNITARIO

La semana pasada los vietnamitas se preparaban para celebrar sus cien días sin contagios comunitarios. Un récord que nunca llegó por el sorprendente anuncio el sábado pasado de un contagio comunitario en Danang, un hombre de 57 años que sigue ingresado en estado crítico.

Desde entonces el país ha registrado un total de 93 contagios comunitarios, con Danang en el ojo del huracán por sus 79 infecciones. Dos casos en la capital, Hanói, y otros dos en Ho Chi Minh (antigua Saigón), la urbe más poblada del país.

Solo hoy se registraron 45 positivos en Danang, la cifra más alta en un solo día desde el inicio de la epidemia. Por lo que el Ministerio de Salud se ha visto obligado a redoblar esfuerzos y enviar a la ciudad un equipo especial de expertos médicos y un millar de trabajadores sanitarios.

La situación en esta ciudad costera, la tercera más poblada del país, es especialmente grave porque casi todos los contagios provienen de tres centros médicos. En especial de su principal hospital, donde también ha habido varios positivos entre los trabajadores sanitarios.

Con esas tres clínicas cerradas al público, las autoridades locales han anunciado la creación urgente de un hospital de campaña en un complejo deportivo para garantizar la atención sanitaria de todos los pacientes.

MEDIDAS DE PREVENCIÓN

Aislada del resto del país, Danang vive su confinamiento más estricto desde el inicio de la pandemia, con calles vacías y cientos de negocios cerrados. Mientras en las dos grandes ciudades del país, Hanói y Ho Chi Minh, se comienzan a tomar las primeras medidas para evitar brotes a escala nacional.

Las autoridades de ambas poblaciones han reimpuesto el uso de la mascarilla, han bloqueado y desinfectado calles donde se sospecha que ha habido contagios. Además han cerrado bares y otros locales de ocio y han hecho pública una lista de lugares en los que estuvieron los contagiados antes de su ingreso hospitalario.

Estas medidas preventivas se completarán con test masivos a todos aquellos ciudadanos que hayan estado en Danang en el último mes (en torno a 40.000 en total). Y la obligación a que permanezcan en cuarentena, y el rastreo de todos los contactos de quien dé positivo.

A este esfuerzo contribuirá la ayuda de 6,2 millones de dólares a Vietnam anunciada hoy por el Banco Mundial para fortalecer la vigilancia contra el coronavirus y la capacidad de análisis ante el nuevo rebrote.

DESCONCIERTO DE LOS RASTREADORES

Los rastreadores, cuya eficacia fue clave en el éxito vietnamita contra la plaga, llevan una semana desconcertados. Incapaces de detectar el origen del virus en un país que oficialmente mantenía todas sus fronteras cerradas desde el 23 de marzo.

El primer ministro, Nguyen Xuan Phuc, reconoció esta semana que será imposible dar con el paciente cero de esta nueva oleada. Porque lo más probable es que el virus llevara semanas circulando por Danang y quizá por otras partes del país.

Para algunos expertos, la vuelta del virus es fruto del exceso de relajación entre la población general. Pues había abrazado una normalidad plena con los centros turísticos abarrotados y también entre las autoridades y el personal sanitario, confiados en que el virus había sido desterrado del país para siempre.

Una muestra de esa relajación es la del paciente 449, un hombre de nacionalidad estadounidense que desde el 26 de junio había pasado por dos hospitales de Danang y uno de Ho Chi Minh con problemas respiratorios agudos sin que se le realizara el test de la COVID-19 hasta que se confirmó la vuelta del virus al país.

Las autoridades no han establecido un vínculo claro entre el abrupto regreso del virus y la inmigración ilegal. Pero desde que se anunció el primer caso se suceden las detenciones de implicados en redes de tráfico de personas. Por lo que el primer ministro hizo un llamamiento a los gobiernos provinciales para reforzar los controles fronterizos.

Desde el 23 de marzo, tan solo los vietnamitas repatriados de otros países y los trabajadores extranjeros expertos tienen derecho a entrar en el país. Y todos tienen que someterse a varios test y a una cuarentena de 15 días en dependencias del Ejército.

EFE