Las huellas que deja el cáncer de mama pueden ser muy profundas a nivel físico y emocional. En un primer momento, hay una lucha intensa por vivir y afrontar con fortaleza los tratamientos para lograrlo. Si bien hay muchas mujeres que pierden la vida en el camino, cada vez son más aquellas que se convierten en sobrevivientes y logran vencer a esta dolorosa enfermedad.