Un vecino de la localidad de Bondi, Australia, denunció a un grupo de jóvenes españoles que habrían organizado una fiesta a pesar de las restricciones por el nuevo coronavirus.
El hombre grabó la reunión y llamó a la Policía para que controle la situación. En medio del episodio, una mujer sale y le dice que no puede tomar fotografías y alguien más alerta a todos que el vecino está grabando.
Según RT, » Posteriormente, un joven sale del interior de la vivienda y se dirige hacia el hombre que graba el video para cubrir el lente de la cámara. «Ninguno de nosotros está enfermo, todo está bien», dijo el joven en ese momento, según las declaraciones del vecino a Daily Mail».
Cuando la Policía llegó al lugar, los jóvenes participantes en la reunión ya se habían retirado.