Los animales silvestres viven en constante amenaza en nuestro país.
Muchas especies que deberían permanecer en la naturaleza son alejadas de su hábitat para tenerlas como mascotas o venderlas a coleccionistas.
Las consecuencias de estos actos son muy graves tanto para las especies en peligro, como para el ecosistema en general, además de ser un delito.
Cada día se realizan decenas de rescates y aunque hay lugares en los que los cuidan y recuperan su salud, el regreso a su hogar no siempre es posible.
Hoy hablamos del riesgo que corre nuestra vida silvestre.