El fenómeno natural de erosión del río Montana en el sector de San Rafael, ha causado fisuras en la Troncal Amazónica, en el tramo de la vía Baeza – El Reventador, km 67.
El normal tránsito vehicular por la Troncal Amazónica se ha visto alterado debido al peligro en dicha zona.
El pasado 5 de junio de 2020, la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR) declaró a la zona en alerta naranja. Sin embargo, no se descarta el cambio de alerta a roja dado el avance de la erosión.
El ministro de Transporte y Obras Públicas, Gabriel Martínez, cumplió agenda en la provincia de Napo para verificar el avance de obras en la zona.
El recorrido se inició en Lago Agrio, por la Troncal Amazónica hasta el sector de San Rafael, sitio en donde el socavón del río Montana afectó la vía de manera considerable. Al final estuvo en el tramo Baeza-Tena, sector Guacamayos.
Un día antes, el viceministro de Infraestructura del Ministerio de Transporte y Obras Públicas, Ricardo Paula, junto a personal del MTOP y miembros de la empresa contratista definieron el cierre inmediato de la vía, en horarios diurnos y nocturnos.
Una vía alterna para mantener la conexión interprovincial
A 650 metros de distancia de la Troncal Amazónica se construye una variante provisional de la vía.
Paula señaló que la aceleración de la erosión de los ríos Coca y Montana genera condiciones diferentes debido a que se evidencian desprendimientos de tierra y agrietamientos en la capa de rodadura de la vía. Esta situación alerta graves complicaciones para el talud.
El camino piloto se desarrollará con el objetivo de brindar una ruta alterna y garantizar la movilidad entre Napo y Sucumbíos.
Paralelamente a esta construcción temporal se concreta el nuevo trazado de lo que será la variante definitiva de 1 km aproximadamente. Por el momento se recomienda a los usuarios tomar la ruta alerta desde Quito-Ambato-Baños-El Puyo-Tena-El Coca-Lago Agrio.
Martínez constató el avance de la vía alterna provisional para el paso de vehículos cuya apertura se prevé en los próximos días.
En el sector de Guacamayos, Martínez concluyó que luego de un trabajo intenso por varios meses se termina la construcción de 15 terrazas para estabilizar el talud y evitar mayores deslizamientos.
La intención es recuperar la conectividad entre Pichincha y Napo, mediante la reconstrucción de este tramo culminará a finales de junio.