En apenas dos meses, tres cabecillas de organizaciones delictivas recuperaron su libertad al beneficiarse de medidas de excarcelación. Especialistas aseguran que estas decisiones trasladan el problema a las calles donde desde el Estado intenta combatir al crimen organizado.
Depués de cumplir el 60% de su pena por el delito de receptación alias «El Trompudo», líder de la organización Chone Killers, cumplirá el resto de su sentencia fuera de prisión, luego beneficiarse de una medida de prelibertad.
Al cabecilla de los «Chone Killers» lo procesaron por delincuencia organizada, asociación ilícita, tenencia de armas e incluso asesinato. Alias «El Trompudo», hermano de alias «Ben 10» se suma a la lista de cabecillas de organizaciones delictivas que han recuperado su libertad.
En octubre pasado también liberaron a alias «El Ronco», líder de «Los Lobos»; y un mes después eñ líder de los Tigerones también recuperó su libertad.
Desde el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores (SNAI) se explica que si cumple su pena y sus registros dan fe de un buen comportamiento puede acceder al derecho de una prelibertad.
«Si cumple los requisitos, más allá de que nos indigne, de que no nos guste (…) es un derecho que tiene el privado de libertad», indicó Alexandra Mantilla, directora de beneficios penitenciarios del SNAI.
Sin embargo, para los expertos indican que esta situación es incorrecta y preocupante porque parte de quienes recuperaron su libertad son investigados por la participación de sus organizaciones en las masacres de la Penitenciaría de septiembre y noviembre.
El director ejecutivo del Comité de Derechos Humanos, Alfonso Ortiz, señala que estas decisiones judiciales trasladan el problema a las calles. Y por lo tanto se está dejando en indefensión a la ciudadanía.
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