Los trabajadores de Amazon en Nueva York aprobaron el viernes constituir el primer sindicato del coloso de la web en Estados Unidos, lo que marca un hito para esa compañía que se oponía a la sindicalización de sus empleados.
Los trabajadores del depósito Staten Island JFK8 aprobaron sindicarse por 2.654 votos contra 2.131, según el recuento de la agencia federal de relaciones laborales. Lo que estaba en juego era la capacidad de Amazon de mantenerse libre de sindicatos en su mercado doméstico, un estatus que protegió ferozmente desde la creación de la empresa en la década de 1990.
«Bienvenidos al primer sindicato de Amazon en Estados Unidos», tuiteó el organizador Christian Smalls. Durante la ardorosa campaña, la compañía trató de disuadir la sindicalización en reuniones obligatorias y con carteles y otros mensajes en los lugares de trabajo.
Amazon alega que la sindicalización dañará las relaciones directas entre la empresa y los trabajadores, será un salto a lo desconocido y no garantiza que los trabajadores obtengan mejores salarios o mayor seguridad laboral.
– ¿Reviven los sindicatos? –
La proporción de trabajadores estadounidenses sindicalizados bajó de casi el 20% en 1983 a cerca del 10% en 2021, según la Oficina de Estadísticas Laborales.
En Amazon, los trabajadores de un depósito de Bessemer, Alabama, votaron el año pasado por abrumadora mayoría contra una propuesta de sindicalización apoyada por el Sindicato de Minoristas, Mayoristas y Grandes Almacenes (NLRB).
Pero la NRLB pidió realizar una nueva votación alegando que Amazon interfirió en la elección por medio de presiones a los trabajadores. En la nueva votación, 993 trabajadores votaron contra formar el grupo laboral y 875 se pronunciaron a favor.
Sin embargo, hubo 416 papeletas «impugnadas», lo cual era una cantidad «terminante», según la Junta Nacional de Relaciones Laborales. Eso significa que el número de papeletas aún por resolver es suficientemente grande como para decidir el resultado final.
Los responsables del sindicato dijeron el jueves en conferencia de prensa que su campaña del año pasado -que fue respaldada hasta por el presidente Joe Biden- ayudó a impulsar medidas similares en todo Estados Unidos.
En la cadena de cafeterías Starbucks se desató un movimiento para cambiar la dinámica laboral en dos locales del norte del estado de Nueva York. Desde entonces, campañas sindicales se están en desarrollando en más de 150 locales de la multinacional.
En Starbucks la campaña fue liderada mayormente por trabajadores jóvenes y con estudios universitarios.
Campañas sindicales también han tenido éxito recientemente en museos, ONG, empresas de comunicación y universidades. Más allá de esos sectores, los sindicatos han batallado por ganar terreno, especialmente en estados del sur y del oeste, donde el porcentaje de empleados sindicalizados es particularmente bajo.
Fuente | Agence France-Presse/