Incendios, pandemias y ataques piratas son algunas de las amenazas que han tenido que enfrentar los guayaquileños.
De cada uno de estos eventos se levantaron con fuerza y nuevas energías.
Y es que si algo los caracteriza es su capacidad para ser recursivos, capaces de convertir una tradición milenaria en gigantescos monigotes que hacen que el mundo entero regrese a verlos cada fin de año.
Recopilamos algunos de estos elementos que los hacen únicos en este reportaje acerca de Guayaquil y su historia.