Las manos lo delatan. «¿Quiénes somos?», preguntaba un hombre mientras grababa un video. «Tiguerones», respondían niños, adolescentes y jóvenes, sentados en una tribuna de cemento. El hombre arengaba a repetir consignas mientras hacía signos con la mano.
Los pesados anillos, las uñas, las pulseras y los tatuajes en la piel son los mismos de Byron R., capturado la noche del viernes 30 de septiembre del 2022 durante una persecución en Esmeraldas.
En esa intervención también fue detenido un sargento de Policía en servicio activo, de quien ahora las autoridades investigan si está conectado con los Tiguerones.
El clip ha causado preocupación. Las imágenes serían una evidencia de cómo los Tiguerones reclutan niños. La organización ha sido vinculada al tráfico de droga y a hechos de violencia.
«El Ministerio de Educación tiene que estar en los colegios. No vamos a permitir que Esmeraldas se pierda», dice el comandante de la Subzona de Esmeraldas, coronel William Calle.
Byron R., ecuatoriano de 30 años, tiene distintas detenciones desde el 2013, por robo y tenencia de armas. En la persecución del viernes, la Policía se inacutó de una subametralladora, 67 municiones calibre 9 mm y un kilo de alcaloides, según el coronel Calle.
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