La decisión de Solca de suspender la atención a nuevos pacientes del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) queda sin efecto.
Solca le exige al IESS el pago de 140 millones de dólares, una deuda que se viene arrastrando por 14 años y que pese a los compromisos de pago no ha sido cancelada.
Según la institución, los 30 millones de dólares desembolsados por el IESS semanas atrás son por facturas de octubre, noviembre y diciembre del año pasado y no son abono a la deuda.
A Solca Quito el IESS le adeudaría 60 millones, a Solca Guayaquil 30 millones y a Solca Portoviejo 17 millones