Dedicarse a la magia o al ilusionismo es difícil cuando hay antiguos prejuicios atrás de esta profesión.
Sin embargo, quienes la ejercen lo ven como un arte escénico que solo busca entretener y saciar esa necesidad de las personas de maravillarse ante lo que no tiene explicación.
En la siguiente nota conoceremos a Raúl Adatti, uno de los magos más reconocidos de los últimos años en el país.