Quito recibió este jueves el sello «Safe travel», otorgado por el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC, por sus siglas en inglés), en reconocimiento a la aplicación de los protocolos de bioseguridad para la prevención de la COVID-19 en la actividad turística.
La ministra de Turismo, Rosi Prado, aseguró que el sello se consiguió tras entregar al WTTC «21 protocolos de bioseguridad, que fueron avalados y analizados».
El WTTC representa al sector privado global de viajes y turismo, con la misión de garantizar que el sector sea fluido, seguro, inclusivo y sostenible.
Ecuador recibió el sello el pasado 15 de agosto, tras casi un mes de haber postulado su candidatura.
«Ahora tenemos el compromiso de todo el sector turístico de utilizarlo en todos los establecimientos que están en el catastro de turismo», dijo Prado
Sector empresarial
El sello responde también a la implementación de medidas desde el sector empresarial, señalaron los organizadores de la ceremonia de entrega.
Busca promover un destino seguro, generando confianza y brindando una experiencia única y significativa durante todo el viaje. Pretende también garantizar el bienestar y la seguridad de los turistas y prestadores de servicios turísticos.
Está diseñado para que los viajeros reconozcan gobiernos y empresas de todo el mundo que han adoptado protocolos estandarizados de salud e higiene, para que los consumidores puedan experimentar «viajes seguros».
Pérdidas
Quito Turismo calcula en cerca de 500 millones de dólares las pérdidas económicas en el sector por la crisis sanitaria. Pero señala que la actividad turística es una de las más resilientes y permite una rápida recuperación ante cualquier impacto, ya sea natural o antrópico.
De acuerdo a esa entidad, la contribución directa del turismo al PIB de Ecuador fue de 2,2 % en 2019. Además, 4,04% a los ingresos de la ciudad de Quito.
Ese año se registró la llegada de 684.390 extranjeros a Quito y de casi un millón y medio al país, y un ingreso de divisas al país por turismo receptor estimado en más de 2.287 millones de dólares. EFE