La identidad de un pueblo también se refleja en su lengua y cuando un quiteño habla seguro su manera de hacerlo lo delata.
Los capitalinos tienen su singularidad por su forma de alargar las palabras, de hablar en diminutivo o de usar verbos compuestos.
A pesar de tener muchas variaciones a lo largo del tiempo, ciertas expresiones permanecen de generación en generación.
El cronista Patricio Guerra afirma que “estas expresiones pueden ser consideradas parte del patrimonio inmaterial ya que contienen tradición, historicidad y son utilizadas por una colectividad”.
Las frases más usadas por jóvenes hoy en día son: “a lo bestia, qué fuef, ni fregando”. Mientras que las expresiones como «alairito, ananay, alzando pelito, breve breve» poco a poco van desapareciendo por el reemplazo de nuevos modismos.
Esta particular forma de hablar de quiteños y quiteñas permite que la ciudad tenga su identidad y así se convierta en única en el mundo.
#Hora25 | Valentina Pacheco, actriz, nos cuenta del personaje icónico de ‘la torera’, resalta que “ella amaba a su Quito, se recorría todo el centro de Quito con sus tacones, ella era la dueña de Quito” pic.twitter.com/aSfUqe3B5s
— Teleamazonas (@teleamazonasec) December 5, 2022