Las autoridades de salud de Puerto Rico anunciaron el lunes que su campaña de vacunación contra el COVID-19 se concentrará exclusivamente en la población de 65 años o más y suspenderá la inoculación de personal del servicio de emergencias.
El secretario de Salud, Carlos Mellado, señaló que la nueva política entrará en vigor para las próximas cuatro semanas.
El territorio estadounidense ya ha vacunado a más de 250.000 personas, iniciando con trabajadores de salud y posteriormente personal de emergencias.
El Departamento de Salud también suspendió la vacunación para la Comisión Estatal de Elecciones del país al señalar que no había sido autorizada.
En un comunicado, Mellado reiteró en un comunicado que no se va a tolerar que no se respete el orden de vacunación y subrayó que los adultos mayores son la prioridad en el proceso.
El departamento indicó que la vacunación de personal de emergencias se reanudará una vez que los adultos mayores hayan recibido sus inyecciones.
Puerto Rico ha reportado más de 156.000 contagios de coronavirus confirmados y sospechosos y más de 1.800 decesos.