La edición rápida de la Champions League, que se disputa en Portugal ya tiene a su primer finalista. Se trata del PSG de Francia.
El equipo dirigido por Thomas Tuchel fue superior a su rival alemán, el RB Leipzig, sobre la cancha del estadio Da Luz, en Lisboa.
Apenas a los 13 minutos, el brasileño Marquinhos abrió la ruta de la victoria luego de un tiro libre y su aparición por todo lo alto. El defensa se elevó solo y con un cabezazo limpio mandó el balón a las redes.
Leipzig intentó igualar las acciones sobre el campo, pero no tuvo el control del esférico. PSG, en cambio, se aplicó antes del final del primer tiempo para marcar el segundo gol.
El argentino Ángel Di María, a los 42, aprovechó la presión alta de sus compañeros para recibir un balón solo en el área y gritar de emoción.
Más presión en el segundo tiempo
El control del partido lo tuvo siempre el PSG sin permitir ni el juego ni las maniobras ofensivas que acostumbra el Leipzig. Los alemanes, a diferencia del juego contra Atlético de Madrid, lucieron apagados y sin ideas.
Cuando corría el minuto 56, una jugada confusa en defensa y recuperación de los parisinos en ataque, permitió el tercer tanto a través de Juan Bernat.
También hubo un gol bien anulado a Kylian Mbappé, aún con 0-0, por una mano previa de Neymar, y una cuantas ocasiones del delantero brasileño, que rozó el gol hasta en tres oportunidades.
Tras el pitazo del árbitro se desató la alegría de los parisinos que llegan a su primera final de Champions League.
Su rival saldrá del partido entre el Bayern Múnich alemán y el Lyon de Francia.