Debido a la pandemia la celebración de este Fin de Año será atípica, en el país está prohibido quemar años viejos. En Quito cerca de 50 000 servidores públicos practicarán de los operativos del 31 de diciembre para evitar las aglomeraciones.
Las autoridades han considerado que la tradicional quema de años viejos concentra a las familias y puede generar contagios de coronavirus.
Desde el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) Nacional se anunció la semana anterior que la venta y quema de monigotes está prohibida a escala nacional.
Además está prohibida la venta juegos pirotécnicos, la venta y utilización o combustión de globos inflamables en todos los lugares públicos.
No obstante, en Quito existe una ordenanza vigente que prohíbe la quema del año viejo en los espacios públicos. En ella se establece una sanción del 50% del salario mínimo vital. Asimismo se tiene previsto realizar operativos en toda la ciudad este 31 de diciembre.
Según Edy Zambrano, presidente de la asociación de monigotes solidarios de Guayaquil, luego de las decisiones de las autoridades los dejarán en la quiebra.
Los comerciantes, quienes por años se han dedicado a la venta de monigotes, creen que la inversión que realizaron se ha perdido totalmente.
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