La vacuna contra el COVID-19 puede causar efectos secundarios, según los reportes estos son muy pequeños y no siempre se presentan tras la inoculación.
Los efectos secundarios que se han presentado en pocas personas que recibieron la vacuna son hinchazón y dolor en el brazo en donde se les inyectó, que es una reacción común e incluso ‘normal’ cuando se aplica así un medicamento.
Los otros efectos secundarios pueden ser dolor de cabeza, sensación de cansancio, fiebre, que son signos, según los expertos de que el fármaco está haciendo efecto en el organismo de la persona que recibió la vacuna.
El médico salubrista Esteban Ortiz habla al respecto.
Cuando se contempló el uso de vacunas ya se habló de los efectos secundarios que ésta podría causar en quienes recibieran el fármaco y esto causó preocupación en el público en general y en ciertos sectores que dominan las teorías conspirativas.
Pero ahora se ha demostrado que los efectos secundarios de la vacuna se presentan como una señal de que el organismo reacciona tal y como se supone que debe hacerlo cuando recibe una vacuna, que es lo que los expertos esperaban con el objetivo de controlar los efectos de la pandemia en todo nivel, social, económico y político.
El proceso de vacunación masiva se desarrolla de manera desigual en varias naciones del mundo y mucho más en la región de Sudamérica, pues mientras en Chile ya hay 3,6 millones de personas que recibieron las dos vacunas contra el COVID-19, hay otros países que no cuentan ni siquiera con un número de vacunas que garantice la protección de médicos y de grupos vulnerables.