Los pasajeros del crucero Costa Esmeralda que tenían que desembarcar este jueves en el puerto italiano de Civitavecchia y que se vieron bloqueados debido a un posible caso de coronavirus que finalmente fue descartado, desembarcaron a primeras horas de la mañana.
A bordo del barco hay 6.000 pasajeros, entre ellos españoles, y cerca de mil miembros de la tripulación, pero solo 1.143 de ellos tenían previsto desembarcar en el puerto romano, mientras que el resto proseguirán su viaje.
La nave Costa Smeralda había realizado etapas en las ciudades españolas de Palma de Mallorca, Barcelona y la francesa Marsella.
Las autoridades italianas prohibieron el desembarco después de que una pasajera originaria de Macao, región autónoma de la costa sur de China, presentase fiebre y problemas respiratorios y tuviera que ser sometida a una prueba para conocer si se trataba de infección por el coronavirus.
Después de más de doce horas, se confirmó que las pruebas eran negativas y la compañía Costa Crociere informó a los pasajeros que tenían que desembarcar en Civitavecchia de que podrían quedarse en sus camarotes durante esta noche y desembarcar mañana, pero que si lo preferían también podían libremente abandonar ya el barco.
También comunicó que el crucero saltará la etapa de La Spezia y permanecerá en el puerto de Civitavecchia hasta las 18.00 horas (17.00 GMT) para dirigirse posteriormente a Savona (noroeste) y continuar su ruta.
Las personas que tenían que embarcar este jueves fueron alojadas en hoteles de la zona y ahora empezarán a entrar en el barco para comenzar su crucero.
Algunos de los pasajeros han comentado en las redes sociales que durante la jornada de este jueves se han mantenido las actuaciones y actividades deportivas, aunque varios han denunciado la falta de información de lo que estaba sucediendo.
La noticia de que los resultados definitivos eran negativos se comunicó a los pasajeros durante la cena y fue recibida con aplausos.
Tras esta experiencia, Costa Crociere anunció que no dejará embarcar en sus cruceros a personas que hayan estado en China en los últimos 30 días.
Por otro lado, anoche las autoridades sanitarias italianas han confirmado dos casos de enfermos de coronavirus, dos turistas chinos que llegaron al país hace pocos días.
Los enfermos han sido aislados en el hospital romano Lazzaro Spallanzani, especializado en enfermedades contagiosas, al igual que el resto del grupo de chinos con los que viajaban, explicó el ministro de Sanidad, Roberto Speranza. EFE