Parlamento Europeo apoya las protestas antirracistas

El Parlamento Europeo (PE) condenó este viernes de forma «enérgica» la muerte a manos de la policía del afroamericano George Floyd en Minneápolis (EE.UU.).

El PE expresó su apoyo a las protestas que han tenido lugar en todo el mundo a raíz de este episodio de violencia policial.

La resolución, que salió adelante con 493 votos a favor, 104 en contra y 67 abstenciones, arranca subrayando que «la vida de las personas negras cuenta».

En referencia al movimiento ‘Black Lives Matter’ que gana fuerza en Estados Unidos a raíz de la muerte de Floyd a manos de la policía.

Condenan el supremacismo

Los eurodiputados «condenan el supremacismo en todas sus formas» y advierten contra el uso de eslóganes «que tienen por objeto socavar o destruir al movimiento ‘Black Lives Matter’ y diluir su importancia».

El grupo Identidad y Democracia en la Eurocámara (ultraderecha) había presentado su propio proyecto de resolución, en el que insistían en varias ocasiones en modificar este lema en el texto y sustituirlo por «All Lives Matter» (Todas las vidas importan), empleado de forma habitual por detractores del movimiento antirracista.

La resolución aprobada recalca que «el discurso racista y xenófobo no está amparado por la libertad de expresión».

Además, pide a los Estados miembros que denuncien y eviten las tradiciones «racistas y afrofóbicas».

Solidaridad con las protestas

Respecto a las manifestaciones masivas el Parlamento Europeo expresa «su solidaridad, respeto y apoyo a las protestas pacíficas».

El texto final incluye una enmienda que «recuerda el derecho de los ciudadanos a grabar escenas de violencia policial que puedan utilizarse como prueba».

Esta misma semana, una eurodiputada del grupo verde denunció haber sido víctima de una humillación por parte de la policía cuando intentaba tomar imágenes de una interacción entre dos jóvenes negros y nueve agentes de policía en Bruselas.

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Pierrette Herzberger-Fofana, diputada alemana de origen maliense, relató que los agentes le arrebataron el teléfono, le quitaron el bolso y le empujaron contra la pared, y no le creyeron cuando les dijo que era eurodiputada pese a que les enseñó sus dos pasaportes, su acreditación del Parlamento Europeo y la tarjeta de residencia en Bélgica.

El presidente de la Eurocámara, David Sassoli, envió una carta a la primera ministra de Bélgica, Sophie Wilmès, para pedirle medidas ante este tipo de casos de violencia policial.

EFE