«París está lleno». La frase la firma el director del Observatorio de Turismo de la capital francesa, Thomas Deschamps. Se refiere al fin de semana del 28 de mayo, cuando el Liverpool y el Real Madrid jugarán la final de Champions League en el Estadio de Francia.
A falta de una semana para el partido, señala a Efe, las reservas rozan el 90 %, una tasa que ha subido del 10 al 15 % a causa del partido, según los datos de su oficina.
Cabe recordar que la UEFA decidió retirar la final de la Liga de Campeones a San Petersburgo, como represalia por la invasión de Ucrania. Luego, se la atribuyó a París, y desde entonces los teléfonos de los operadores de turismo comenzaron a echar humo.
Es que ese sábado no es un día cualquiera en la capital del Sena. El jueves 26 es el único festivo entre semana del mes de mayo en Francia. De ahí el puente vacacional significa que habitantes de provincias aprovechan para visitar la torre Eiffel y el resto de los atractivos de la ciudad.
A eso se suma que desde este domingo comenzará Roland Garros, otro foco de atracción para visitantes. En este caso, apuestan por establecerse en el oeste de la capital, cerca del complejo que acoge el Grand Slam de tierra batida.
Reservas hoteleras llenas
Los cuadernos de reservas de los hoteleros estaban ya bastante llenos y a ello se sumó la final de la Champions League. En el estadio se espera unas 75.000 personas en el norte de la ciudad para dirimir quién será el próximo campeón de Europa.
Fue la vuelta de tuerca definitiva para llenar París. «Creo que todavía es posible encontrar una habitación; pero puede que haya problemas para encontrar una habitación que no sea muy cara o que tenga una relación calidad precio adecuadas», explica Deschamps.
Queda lo más caro y, por eso, el responsable del Observatorio de Turismo anima a los aficionados a apresurarse y a buscar todo tipo de alternativas. Otra opción son los apartamentos turísticos, los albergues juveniles o, incluso, el cámping que hay en la ciudad.
Suben los precios
El incremento de la oferta también ha provocado una subida del precio. Pero Deschamps considera que, en el caso de París, es una ciudad acostumbrada a recibir un elevado número de visitantes todo el año. Por ello cree que el alza de precios no será tan fuerte.
Sus cálculos apuntan a que la subida puede ser de entre el 10 y el 15 %, lejos del encarecimiento de hasta el 50 % constatado en otros casos.
También han subido los precios de los vuelos, animados por el incremento de la demanda. Entre el 15 y el 20 % más de reservas registradas desde España para ese fin de semana. Esto va en línea con el buen comportamiento que el turismo español está registrando en París desde hace unos meses.
Los españoles son los primeros que parecen haber dejado atrás la crisis de la covid en lo que se refiere a sus visitas a Francia. El número de visitantes es casi similar al registrado en 2019, mientras que otros destinos todavía están por debajo de las cifras anteriores a la pandemia.
Bares, restaurantes y museos
Deschamps no espera que la final de la Champions League incremente las visitas a museos; pero sí que los aficionados españoles y británicos que acudan a la final disfruten de bares y restaurantes de la ciudad. «Los hosteleros sacarán partido», dice el responsable de la Oficina de Turismo, que también cree que se les verá en monumentos al aire libre, como la torre Eiffel, y en los numerosos parques de la ciudad.
Cada equipo ha tenido derecho a 20.000 entradas, otras 12.000 salieron a la venta en abril y el resto están en manos de la UEFA. El Observatorio de Turismo cree que la hotelería de alta gama se beneficiará más del evento que la de media y baja. EFE