El parapentista turco Hasan Kaval llevó a cabo otra gran hazaña en los aires: intentó dormir en el aire tras colocar un paracaídas en una cama, con una mesita de noche y una pantalla de lámpara. El profesional de 28 años contó con un despertador para poder realizar su aterrizaje con éxito.
El vehículo con el que contó el turco despegó de Yassı Tepe, una colina de unos 800 metros (2.625 pies) de altura en Alanya, situado en la provincia de Antalya. Kaval usó convenientemente una máscara y se quedó dormido durante 15 minutos.
Este último truco fue patrocinado por una fundación de promoción turística local con el fin de promover las actividades turísticas en la zona. Kaval había colocado previamente un sofá y un televisor en su paracaídas para recrear la atmósfera de su sala de estar en el cielo.
“Estoy feliz de contribuir al turismo. Quiero mostrarle a la gente que el parapente no es un deporte peligroso. Son las personas las que hacen que sea peligroso volar con pilotos sin experiencia y sin formación ”, añadió el parapentista a la Agencia de Noticias Demirören (DHA).
Fuente | Reuters/Daily Sabah