El secretario general de la ONU, António Guterres, pidió hoy a los países declarar una «emergencia climática hasta que se alcance la carbono neutralidad», en su intervención en la Cumbre sobre Ambición Climática 2020, organizada junto con el Reino Unido y Francia.
En el evento virtual participaron más de 75 dirigentes y organizaciones. Durante su discurso, Guterres recordó que 38 Estados ya han reconocido «la urgencia» de la situación. Además, instó a todos a adoptar el objetivo de reducir a cero neto las emisiones de gases contaminantes para 2050; y en un 45 % para 2030.
El experto portugués pidió declarar la emergencia climática pues avisó de que «no se avanza en la dirección correcta». Asimismo advirtió que, «si no se cambia de rumbo», «podrían superarse los 3ºC este siglo».
La Cumbre de Ambición Climática es la antesala de la Conferencia de la ONU sobre el Cambio Climático COP26, que organizará el Reino Unido el próximo noviembre en Glasgow.
CUMBRE DE AMBICIÓN CLIMÁTICA
La Cumbre de Ambición Climática 2020 urgió este sábado a los países a reducir a cero neto sus emisiones contaminantes para el año 2050; en pro de un desarrollo sostenible que permita crear empleos y salvar el planeta.
Al inaugurar el evento virtual, donde participaron más de 75 dirigentes y entidades, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, pidió a los jefes de Estado y de Gobierno declarar una «emergencia climática» en sus territorios «hasta que se alcance la carbono neutralidad».
Guterres recordó que 38 Estados ya han reconocido «la urgencia» de la situación. E instó a todos a adoptar el objetivo de reducir a cero neto las emisiones de gases contaminantes para 2050 y en un 45 % para 2030.
CINCO AÑOS DEL ACUERDO DE PARÍS
Como coanfitrión de la cumbre -antesala de la Conferencia de la ONU sobre Cambio Climático COP26, que organizará el Reino Unido el próximo noviembre en Glasgow-, el primer ministro británico, Boris Johnson, subrayó por su parte que apostar por un desarrollo verde «no es de eco-frikis», sino que tiene sentido económico porque permitirá crear «millones de empleos».
Aseguró que su país, que se ha comprometido a reducir las emisiones en un 68 % sobre niveles de los años 90 del siglo XX para 2030. Y se convertirá en «la Arabia Saudí de la generación de energía eólica» en la próxima década.
El Gobierno británico anunció hoy además que dejará de financiar mediante préstamos y ayudas proyectos de petróleo, gas y carbón con participación británica en el extranjero. En los que en los últimos cuatro años ha invertido 21.000 millones de libras (unos 23.000 millones de euros).
EL PAPA PIDE UN CAMBIO DE RUMBO
Tras el pedido de la «emergencia climática» por la ONU, el papa Francisco pidió un cambio de rumbo.
El papa Francisco dijo que «ha llegado el momento de un cambio de rumbo» en la defensa del medioambiente. Y manifestó que el cambio se requiere «para no robar a las nuevas generaciones la esperanza en un futuro mejor».
En su discurso, destacó que «la actual pandemia y el cambio climático, que tienen una relevancia no sólo ambiental, sino también ética, social, económica y política, inciden, sobre todo, en la vida de los más pobres y frágiles».
El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, se comprometió por su parte a que un 97 % del consumo de energía en su país se cubra con fuentes renovables para 2050. Y a lograr un ahorro energético del 50 %, como parte de una estrategia hacia la neutralidad de carbono.
De la cita de hoy, dirigida a tomar impulso de cara a la COP26 de 2021, quedaron excluidos grandes países contaminantes como Rusia, México, Arabia Saudí y Australia, pues los organizadores consideraron insuficientes sus compromisos climáticos.
Desde la histórica cumbre de París en 2015, las emisiones de CO2 a la atmósfera han aumentado de 53.000 millones de toneladas a unos 55.000 millones actualmente, según datos del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (UNEP).
La OMM ha advertido de que el planeta avanza hacia un calentamiento global de 3 a 5 grados a finales de este siglo; en lugar de mantenerse en los objetivos de París (1,5 -2 grados), un hecho que desataría eventos climáticos extremos