Kelly Andrade, joven colombiana, trabajaba como niñera puertas adentro en la casa de Michael Esposito en el distrito de Staten Island de Nueva York (EE.UU.).
Andrade se sometió a un proceso estricto de selección cuyo programa por fin le dio una oportunidad de trasladarse a territorio estadounidense y empezar a trabajar como niñera en la casa de Esposito, empresario dueño de una cadena de comida rápida.
Luego de un tiempo de trabajo como niñera, Andrade encontró a Esposito ajustando la frecuencia del detector de humo ubicado en la habitación en la que dormía y empezó a sospechar que era espiada con una cámara oculta.
Según el portal de noticias RT, “Luego de tres meses de trabajo, halló la cámara en cuestión y en su interior una memoria llena de «cientos de grabaciones» suyas, la mayoría correspondientes a momentos en que estaba «desnuda y/o vistiéndose/desvistiéndose», recoge el expediente legal”.
Andrade dijo que tras darse cuenta de que la niñera encontró las grabaciones, intentó derribar la puerta de su habitación y ella con mucho temor y para no enfrentarlo decidió saltar por la ventana u huir del lugar.
«Tenía mucho miedo. Además de lo que acababa de pasar, ahora no tengo dónde quedarme, estoy en un país completamente desconocido, estoy sola. No tengo dinero, no sé qué voy a comer, no sé qué voy a hacer mañana», recordó Andrade.
Esposito tiene un antecedente de detención por filmación ilegal, pero fue liberado bajo su propia responsabilidad.
Tras lo sucedido, Andrade denunció a Esposito y a la fundación que le consiguió el trabajo por cargos que no especificaron las fuentes, pero detallaron que la niñera calificó a la situación como “extrema e indignante”.