El brasileño Neymar se perderá lo que queda de la temporada con el París Saint-Germain (PSG) al tener que someterse a una operación para solucionar sus problemas en el tobillo derecho. Esto implicará un periodo de recuperación de tres a cuatro meses.
La decisión, según informó el PSG, se tomó después de que el futbolista sufriera un nuevo esguince, el pasado 20 de febrero. Tras el evento, el cuerpo médico le recomendó pasar por el quirófano para evitar la recurrencia en sus lesiones.
Con la intervención, que se le va a realizar en el hospital Aspetar de Doha, Neymar trata de vislumbrar un nuevo horizonte en el que la parte del cuerpo que más contratiempos le está generando en su carrera pueda soportar de mejor manera la carga de partidos y el contacto con los rivales.
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La más reciente de estas lesiones le sobrevino como consecuencia de una aparatosa torcedura durante un encuentro liguero ante el Lille, que le obligó a abandonar el campo en camilla. Pero basta con remontarse a noviembre pasado para encontrar una situación parecida.
El escenario, en aquella ocasión, fue más mediático ya que el delantero del París Saint-Germain tuvo que retirarse del partido inaugural de la fase de grupos de la fase final de la Copa del Mundo ante Serbia. Entonces se le diagnosticó una lesión en el ligamento lateral del tobillo derecho con un pequeño edema óseo, que provocó que se pierda los dos choques inmediatamente posteriores, ante Suiza y Camerún.
14 lesiones a lo largo de su carrera
Antes de aquel contratiempo el exjugador del Barcelona había estado de baja hasta por 358 días por lesiones en ambos tobillos; en total, 14 diferentes a lo largo de su carrera. Una de ellas es la del 28 de noviembre del 2021 cuando estuvo dos meses y medio fuera y se perdió 12 encuentros con su equipo.
También sufrió un esguince desde el 13 de diciembre de 2020 hasta 12 de enero de 2021, es decir, otro mes fuera de competición. Asimismo, en el verano del 2019 estuvo lesionados durante tres meses, también por un esguince, lesión a la que llegó tras recuperarse de otro esguince en esa zona, que lo dejó cuatro meses fuera, entre enero y abril del mismo año.
Desde 2013, cuando aterrizó en el Barcelona, un gran porcentaje de sus lesiones llegaron por el tobillo y pocas veces le han tenido menos de una semana de baja.
Asumido su largo periodo de ausencia y con el parón estival posterior, Neymar no tendrá la premura por volver que exige la competición constante. Se marcha, momentáneamente, tras disputar 29 partidos oficiales en los que marcó 18 goles con el cuadro parisino.
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