El expresidente boliviano Evo Morales se retractó el jueves de haber convocado a conformar milicias armadas del pueblo –como en Venezuela– si regresara a su país.
Las declaraciones se produjeron tras una ola de críticas del gobierno interino de Jeanine Áñez, además de sus partidarios y otras personas.
“Me retracto… Mi convicción más profunda siempre ha sido la defensa de la vida y de la paz”, señala un comunicado que publicó el exmandatario el jueves en Twitter desde Argentina, donde está refugiado.
Morarles, en una concentración de sus partidarios el domingo, les pidió emular el modelo venezolano y organizar milicias armadas del pueblo en caso de que pueda volver al país.
El actual gobierno boliviano acusó a Morales de sedición y terrorismo después que el Ministerio de Gobierno difundiera un vídeo en el que supuestamente se escucha la voz del exmandatario dirigiendo los bloqueos a las ciudades en la crisis poselectoral.
El comentario de Morales en Argentina fue rechazado por Áñez, quien escribió en su cuenta de Twitter que las declaraciones “sólo demuestran que la paz, la reconciliación y la democracia nunca fueron opciones para él”. Agregó que “ante la intención de sembrar terror y violencia sólo encontrarán al pueblo boliviano unido. Y frente a las amenazas, nuestra más profunda vocación democrática”.
El ministro de Gobierno, Arturo Murillo, expresó que esas declaraciones son prueba para la denuncia que se hizo contra el expresidente.
Sus mismos partidarios reaccionaron de manera similar.
El 10 de noviembre Morales renunció en medio de una crisis política y social ocasionada por irregularidades en el conteo de los comicios del 20 de octubre, de los que se había declarado ganador, y tras perder el respaldo de las fuerzas armadas y la policía.
El exgobernante primero se fue asilado a México y posteriormente obtuvo refugio político en Argentina, desde donde funge como jefe de campaña de su partido./ AP