La titular de la Secretaría de Gobernación (Interior) de México, Olga Sánchez Cordero, aseguró que en el país la «nueva normalidad» después de la pandemia de la COVID-19 «será feminista o no será».
Asimismo apuntó que «no será nueva» la normalidad si en México se sigue reproduciendo un sistema de roles de género y de violencia machista.
La nueva normalidad
«La nueva normalidad será feminista o no será una nueva normalidad», dijo Sánchez Cordero durante el conversatorio virtual «Derechos Humanos de las Mujeres: Retos ante el COVID-19».
La titular de Gobernación expuso que el cumplimiento tangible de los derechos de las mujeres «es una cuenta pendiente».
Esta debe saldarse en la nueva normalidad a través de la obtención de mejores resultados en la materia.
«La nueva normalidad no será nueva si continuamos reproduciendo un sistema de roles de género y de violencia machista», añadió.
Derechos humanos de las mujeres
El cumplimiento de los derechos humanos de las mujeres es esencialmente el mismo que teníamos, sostuvo la ministra mexicana.
Apuntó que la problemática «es anterior a la pandemia, que únicamente vino a agravar el estado de la situación».
Destacó que además de seguir con su vida profesional durante el confinamiento, muchas mujeres han tenido que hacerse cargo «de manera casi exclusiva» del cuidado de niños, personas de la tercera edad y de la alimentación en sus familias.
Igual con la limpieza de sus casas que normalmente hacen de manera exclusiva sin la participación de pareja, de su cónyuge, de su concubinario».
Violencia doméstica
Sánchez Cordero señaló que «las mujeres han sido mucho más propensas a perder su empleo durante la pandemia o a recibir salarios menores» e incluso a tener que trabajar sin salario porque «les ha pegado el tema económico de forma verdaderamente fuerte».
Aunado a lo anterior, la funcionaria señaló el aumento de la violencia doméstica contra las mujeres y las niñas durante este periodo de confinamiento.
Estrategias para la nueva normalidad
«Las vivencias han sido diferentes y aunque tal vez no podamos ver las consecuencias de manera inmediata, pueden ser mucho más desfavorables en el mediano y largo plazos», apuntó.
Por eso, dijo, es fundamental que la estrategia en materia de derechos humanos ponga en el centro a las poblaciones vulnerables, entre las que están las mujeres y mucho más las migrantes y las indígenas.
Con Sánchez Cordero en el conversatorio participaron Michelle Bachelet, alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos; Alicia Bárcena, secretaria Ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) y María Noel Vaeza, directora de ONU Mujeres para América Latina y el Caribe.
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EFE