Angela Merkel dijo el martes que nunca gobernaría con el apoyo del partido Die Linke (en español, La Izquierda), una posibilidad que dos de los posibles sucesores de la canciller de Alemania se han negado a descartar antes de las elecciones nacionales del país, que se realizarán en septiembre.
Durante una conferencia de prensa en Berlín, Merkel agradeció los comentarios positivos de su actual vicecanciller Olaf Scholz sobre la coalición de gobierno que forman actualmente. Scholz, quien también es ministro de Finanzas de Alemania, es el candidato de los socialdemócratas de centro izquierda para suceder a Merkel en la votación del 26 de septiembre. Últimamente, Scholz ha tratado de presentarse como el sucesor natural de Merkel, a pesar de que pertenecen a partidos diferentes.
“Conmigo como canciller alemana, nunca habría una coalición en la que participara Die Linke”, dijo Merkel, quien anunció en 2018 que no buscaría un quinto mandato de cuatro años. “Está por verse si esta (opinión) la comparte Olaf Scholz”, agregó.
“En ese sentido, simplemente… habría una gran diferencia entre él y yo en lo que se refiere al futuro de Alemania”, añadió.
Die Linke, un partido de extrema izquierda, tiene algunas de sus raíces en el Partido Comunista que gobernó Alemania Oriental, no le gusta la OTAN y se opone a los despliegues militares alemanes en el extranjero. Los críticos lo acusan de estar demasiado cerca de países autoritarios como Rusia y Venezuela.
El bloque Unión de Merkel —de centroderecha y cuyo candidato Armin Laschet tiene problemas para ganar apoyo entre los votantes, según encuestas recientes— ha tratado de alertar contra la posibilidad de un futuro gobierno de coalición de izquierda entre los socialdemócratas, los ecologistas Verdes y Die Linke.
Tanto los socialdemócratas como los verdes han expresado reservas sobre la política exterior de Die Linke, pero no han descartado categóricamente una coalición a nivel nacional. Alianzas similares, denominadas “rojo-rojo-verde”, gobiernan los estados alemanes de Berlín, Bremen y Turingia.