352 megáfonos se instalaron a escala nacional en las cámaras de videovigilancia del ECU 911 para dispersar a ciudadanos que ingieren bebidas alcohólicas en espacios públicos.
Los megáfonos fueron instalados en primera instancia, hace más de 8 años, para anunciar a la ciudadanía sobre posibles catástrofes naturales. Por la pandemia ahora son utilizados para dispersar a grupos de libadores.
“Lastimosamente hemos visto en varios sectores donde la gente se junta a libar en el espacio público. Llegan a sus vehículos, ponen la música y se generan las llamadas de los vecinos hacia el 911, asegura Juan Zapata, director del ECU 911.
Además, de evitar tragedias como accidentes y altercados, el objetivo de haber instalado estos megáfonos está relacionado también al tema de evitar aglomeraciones y concentraciones en lugares públicos.
“Si es que es reiterativo y no se da cumplimiento previo a este aviso a través de los megáfonos obviamente articulamos la entidad correspondiente para la sanción respectiva”, sostiene Zapata.
La sanción por incumplir esta medida es de 200 dólares
Esta medida ejecutada por el ECU 911 hace pocos meses ha tenido una efectividad del 100% . Gracias a estos llamados, lo sitios calientes donde se evidencia el consumo de licor actualmente permanecen vacíos
Le contamos los detalles en el siguiente video
