El Gobierno de El Salvador, liderado por Nayib Bukele, está envuelto en una polémica por supuestos pactos con miembros de pandillas grandes de ese país.
Según una investigación hecha por el medio salvadoreño, El Faro, y citado por el portal de noticias RT, el Gobierno habría llegado a pactos con las pandillas más grandes de ese país, Mara Salvatrucha-13 (MS-13), Barrio 18 Revolucionarios y Barrio 18 Sureños, con la finalidad de que los índices delictivos y específicamente de asesinatos bajaran.
La investigación de dicho medio apunta a que a cambio de que las pandillas bajen su violencia en las calles, sus miembros encarcelados recibirían beneficios en las penitenciarías en donde cumplen condenas por sus delitos.
Según el portal de noticias RT, “Los fiscales habrían descubierto que las negociaciones, que supuestamente se llevaron a cabo en el Penal de Máxima Seguridad de Zacatecoluca y en el Complejo penitenciario de Izalco, además de a la MS-13, incluían a esas dos facciones de Barrio 18”.
La investigación de El Faro sostiene que la Fiscalía contaría con material gráfico que evidenciaría algunos puntos del caso.
Por parte del Gobierno de El Salvador, Bukele no ha emitido ningún comunicado al respecto, solo se limitó a compartir en redes sociales un video colgado por el periodista José Valdez, en el que se ve el actuar de la Policía ante un pandillero a manera de ironía y dejando ver que esa sería la única forma en la que se relacionan las autoridades con los miembros de las pandillas más peligrosas de la localidad e incluso conocidas a nivel internacional, entre los países de la región.