Más de 80 000 jóvenes no lograron obtener un cupo en las universidades públicas en la primera postulación del test Transformar. Especialistas cuestionan que el servicio militar sea la alternativa que plantea el Gobierno a los jóvenes sin empleo y sin cupo en las universidades.
El libre acceso a la Educación Superior y el incremento de las plazas laborales para los jóvenes, son dos de las grandes promesas del Gobierno de Guillermo Lasso en lo social.
Según información del Ministerio del Trabajo, 33 mil jóvenes están contratados bajo relación de dependencia, a través de la bolsa pública llamada Encuentra Empleo.
El 55% de los que accedieron a cursos gratuitos, que impulsa el Ministerio del Trabajo. De forma general las cifras de desempleo registran una disminución del 0,4%, según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC). Sin embargo, el subempleo creció del 23,3% al 23,9% entre 2021 y 2022.
Los pendientes en materia de acceso a Educación Superior no son pocos, como evidencia de aquello lo ocurrido en la primera convocatoria a rendir el test Transformar, donde se presentaron 215 mil postulantes pero solo había 91 mil cupos asignados.
La promesa del libre acceso a las universidades se diluye frente a una realidad mucha demanda y poca oferta.
Desde el Gobierno se promociona la educación técnica como una alternativa pero también se plantea la incorporación a las fuerzas de seguridad. Declaraciones que dejan aún más inquietudes.
«Si se cambia el discurso que permitió incluso que muchos jóvenes confían y voten por el presidente y no hay una política pública que de verdad no sea tangible y cambios de realidad, al final del día tenemos a jóvenes sin mucha fe ni en la educación ni en el trabajo», señala Sybel Martínez del Consejo de Protección de Derechos.
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