Las noches en Huaquillas, El Oro, muestran escenarios preocupantes, pues las calles y parques las han tomado desde hace semanas los migrantes, en su mayoría venezolanos.
Los migrantes se encuentran represados y el cantón sufre problemas de insalubridad e inseguridad.
Por semanas y cada vez en mayor número han sido tomadas las calles de Huaquillas por migrantes que no pueden cruzar a Perú. La falta de recursos económicos los obliga a dormir en la intemperie.
Esta situación ocurre desde el 26 de enero cuando la frontera sur fue militarizada para impedir la migración ilegal.
Los migrantes consiguen madera para armar una fogata improvisada y poder cocinar los pocos alimentos que los ciudadanos les regalan. Además en las zonas donde se han asentado no hay baños, muchos se han improvisado con toallas donde se duchan con agua que obtienen de las tuberías rotas.
Son más de 400 los migrantes represados en Huaquillas, sin embargo, cada vez sigue llegando más personas a esta zona.
Los servicios de este cantón están colpasados y la inseguridad ha aumentado, según indicó Alberto Astudillo, alcalde de Huaquillas. Además las personas contagiadas que llegan a los centros de la salud de Hauaquilllas han aumentado en un 30%.
Ante la falta de ayuda solicitada, el Municipio anunció que en una semana emprendería su propio corredor humanitorio para retirar a los migrantes.
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