El Gobierno marroquí ha prohibido la organización de fiestas y programas especiales en hoteles, restaurantes y establecimientos turísticos durante la Nochevieja.
Los establecimientos deberán cerrar a las 23:30 y se establecerá un toque de queda nocturno entre la medianoche del 31 de diciembre y las seis de la mañana del 1 de enero.
En un comunicado, el ejecutivo de Marruecos ha anunciado estas nuevas restricciones para evitar la propagación de la pandemia.
También solicita a los ciudadanos que cumplan con el resto de medidas sanitarias impuestas en el país.
El anuncio se produce después de que la semana pasada se detectara el primer contagio de la variante ómicron en Marruecos.
Desde el 20 de octubre, es además obligatorio presentar el certificado Covid para acceder a edificios públicos y privados de Marruecos.
El país mantiene sus fronteras cerradas desde el 29 de noviembre para prevenir la llegada de la variante ómicron.
Este cierre de fronteras, que no tiene fecha de finalización, ha provocado el parón del turismo en el país, un sector que preveía remontar este invierno con los viajes navideños que llenan tradicionalmente los hoteles de ciudades como Marrakech, donde para entrar es obligatorio presentar el certificado de vacunación.