Los duques de Sussex, Enrique y Meghan, han confirmado a la reina Isabel II de Inglaterra que no volverán a trabajar como miembros de la familia real británica, según informó este viernes el palacio de Buckingham en un comunicado.
El príncipe Enrique, nieto de Isabel II, y su mujer decidieron hace un año apartarse de la monarquía, empezar una nueva vida alejados del Reino Unido y ser financieramente independientes. Hecho que se conoció como el «Megxit», pero esta situación estaba pendiente de revisión a principios de 2021.
Con esta confirmación, la jefa de Estado ha decidido retirarle a su nieto, sexto en la línea de sucesión al trono británico, los patrocinios honorarios que ostentaba y que volverán a la soberana, quien los distribuirá a otros miembros de la familia real.
Los duques de Sussex, Enrique y Meghan, anunciaron la semana anterior que esperan su segundo hijo.
En un comunicado difundido en el Reino Unido, el portavoz dijo que Archie Harrison Mountbatten-Windsor, el primogénito de la pareja, «será un hermano mayor». Hasta el momento se desconoce si será niño o niña.
La pareja compartió una foto en blanco y negro en la que aparecen descalzos debajo de un árbol. En ella se muestra a Enrique sentado y Meghan estirada con la cabeza en su regazo, con un vestido largo y tocándose la barriga.
Enrique y Meghan, desvinculada de los compromisos reales, vive en California desde la primavera de 2020, tras haber residido brevemente en Canadá.
Ambos compraron una mansión en el exclusivo barrio de Montecito, en Santa Bárbara, noroeste de Los Ángeles.