Más de 1 millón 400 mil llamadas falsas se realizaron al ECU 911 durante el estado de excepción por la pandemia.
Las autoridades anunciaron que cobrarán multas por más de 223 millones de dólares como dispone la sanción.
Uso indebido
Según el Servicio Integrado de Seguridad ECU 911, «el uso indebido de la línea única para emergencias causa encolamiento de llamadas, entorpece la atención de incidentes reales, desperdicia logística y tiempo para la asistencia ciudadana, obstaculiza la labor de salvar vidas, no permite que las unidades de las entidades articuladas se movilicen de forma oportuna e imposibilita la total disponibilidad de los recursos de socorro, dificultades que se agudizan más en la crisis sanitaria.»
Por esas razones, el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) Nacional resolvió multar económicamente a quienes hayan usado inadecuadamente el 9-1-1 en este período de tiempo.
La magnitud del uso indebido de la línea, si se calculara en forma secuencial hubiera significado cerrar los centros ECU 911 durante 50 días.
Sanciones
La primera vez, se sancionará con USD 100; en la segunda ocasión, se cobrarán USD 400 por la reincidencia; la tercera vez, la multa será de USD 100 (segunda infracción); la cuarta vez se cobrarán USD 400 (segunda reincidencia).
La máxima sanción equivaldría a USD 1.000 (dos infracciones y dos reincidencias).
Se establece este sistema porque una sola persona de Quito realizó 1.236 llamadas (con un promedio de 20 comunicaciones diarias) de mal uso y el valor que le correspondería con otro mecanismo de multas sería impagable para este ciudadano: USD 309.000.
Esta problemática, aseguran, ha afectado la operatividad del sistema ecuatoriano de emergencias en USD 3.833.310.
El costo de una llamada indebida —que dura en promedio 1 minuto con 50 segundos— es de USD 2,56.
En esta estimación se consideran aspectos de logística y tecnología que se deprecia, costos productivos y no productivos, devaluación de mobiliario y equipos, servicios básicos y telecomunicaciones que los asume el ECU 911. Pero lo más importante es que el servicio del 9-1-1 esté 100% disponible para emergencias.
Recaudación
Se tiene proyectada una recaudación de USD 223.188.200 por multas de mal uso del 9-1-1 realizadas desde 790.655 líneas telefónicas.
Para hacer efectivas las multas se ejecutará un proceso sancionador con cuatro etapas y se realizará a través de una plataforma electrónica:
1) El ECU 911 verificará el número de llamadas de mal uso de la línea única 9-1-1.
2) La Agencia de Regulación y Control de las Telecomunicaciones (Arcotel) realizará la recopilación de información de uso indebido del 9-1-1.
3) La Arcotel ejecutará la gestión del cobro de las multas con las compañías de telefonía fija o celular
4) La Arcotel efectuará el registro electrónico de la infracción en la plataforma de MINTEL.
Es necesario que la ciudadanía comprenda la importancia del buen uso de la línea 9-1-1
Con información del Servicio Integrado de Seguridad ECU 911