La Organización Panamericana de la Salud (OPS) dijo el martes que aunque la pandemia del coronavirus se ha intensificado en Latinoamérica, aún hay tiempo para reducir su impacto.
“Nuestra región ha entrado en una nueva fase en la que muchos países están reportando transmisión comunitaria”, expresó Carissa Etienne, directora de la OPS. “La pandemia va a intensificarse en el continente americano y va a empeorar antes de que pueda mejorar”, al igual que ha sucedido en otras partes del mundo, dijo la experta en una conferencia de prensa telefónica desde la sede de la organización en Washington.
Actualmente la región enfrenta un alza en la cantidad de enfermos y muertos, aunque sus números aún están lejos de los que enfrentan países como Italia, España o Estados Unidos.
En Latinoamérica hay al menos 14.000 infectados y 300 fallecidos por el coronavirus. Etienne dijo que en todo el continente hay más de 163,000 casos confirmados y 2.836 muertes.
A nivel mundial, más de 838.000 personas se han enfermado y 41.200 han muerto. Unas 174.000 se han recuperado.
Etienne remarcó que los países deben tomar “ahora” medidas urgentes.
“Aún tenemos una ventana de tiempo para actuar… y reducir el impacto”, expresó y destacó la importancia del distanciamiento social. Instó asimismo a los países a invertir para fortalecer el sistema de salud y preparar a los hospitales.
Más temprano, los habitantes de un pueblo del altiplano de Bolivia fueron obligados a encerrarse en sus casas tras la muerte de una persona por coronavirus luego de la celebración de una fiesta patronal. El otro pueblo del oriente, los vecinos bloquearon los accesos con maquinaria pesada para impedir el ingreso.
Bolivia cumple la segunda semana de aislamiento obligatorio, pero hay gente que rompe las restricciones y desafía las ocho horas de arresto. Sólo una persona por familia está autorizada a salir por la mañana para comprar alimentos y medicinas según el último dígito de su cédula de identidad.
Policías y militares controlan que se cumpla la cuarentena en el país, donde se han registrado hasta el momento 107 infectados por COVID-19 y seis fallecidos.
En Argentina, con 939 infectados y 27 muertos, el Ministerio de Salud amplió la definición de casos sospechosos: a los requisitos como haber viajado al exterior o haber estado en contacto con alguien que estuvo fuera del país, sumó el de haber circulado o ser residente en siete áreas donde existe transmisión local. La ciudad de Buenos Aires y la populosa provincia homónima concentran cerca del 70% de los casos del nuevo coronavirus.
En Chile se contabilizan 2738 casos y 12 muertes, 4 de ellas en las últimas 24 horas, la cifra más alta de víctimas en un día hasta el momento. El gobierno decidió extender la cuarentena total que ya rige en siete barrios de Santiago y las ciudades sureñas de Osorno, Chillán, Temuco y el barrio de Padre de las Casas en la Araucanía a Punta Arenas, esta última a partir del 1 de abril a las 22 horas. Además, se extiende por una semana más al menos, hasta el 9 de abril, la cuarentena a seis de los siete barrios de Santiago y dos semanas más en la Isla de Pascua.
Además, seguía preocupando el contagio en uno de los establecimientos públicos de Larga Estadía de Adultos Mayores (ELEAM) en el humilde barrio de Puente Alto de Santiago, donde una de las funcionarias resultó positiva en coronavirus y hasta el domingo se registraban 6 contagiados, según anunció el subsecretario de Redes Asistenciales Arturo Zuñiga en rueda de prensa.
Los familiares de los 90 adultos mayores del centro, 25 de los cuales han sido aislados según las autoridades por estar postrados, se mostraban ansiosos ante la falta de información oficial.
En Venezuela, las autoridades detuvieron a 18 personas que se encontraban en una fiesta en Caracas por incumplir la cuarentena. Dos de los detenidos resultaron positivos con COVID-19 y fueron trasladados a un hospital. El resto fueron llevados a un centro de diagnóstico estatal para revisarlos, informó el fiscal general Tarek William Saab.
En el país hay tres fallecidos y 135 contagiados.
Poco después, Cuba informó que la isla registra 186 contagios y seis fallecidos. Unos 2.800 pacientes están aislados en centros especializados y ocho personas se curaron.
Patrullas con altavoces pasaban por las calles exhortando a las personas a quedarse en sus hogares –no hay cuarentena obligatoria pero las clases y trámites públicos están suspendidos—y las calles lucían semivacías, aunque persistían las colas en lugares de venta de alimentos.
Las autoridades informaron que habían recibido, procedentes de China, 100.000 test rápidos que ayudarán a detectar la presencia del virus. Además, indicaron que el índice de mortalidad en Cuba por COVID-19 se ubicaba en 3.2%.
En Colombia, donde hay 784 contagiados y 14 fallecidos, un grupo de policías decidió amenizar la cuarentena realizando en diferentes partes de Bogotá “pausas activas” de ejercicios físicos que duran unos 10 minutos y buscan levantar el ánimo de las personas que están en aislamiento y fortalecer su sistema inmune.
Por su parte, el presidente de la Asociación Hotelera y Turística de Colombia, Gustavo Arango, dijo a The Associated Press que desde que se detectó el primer caso de coronavirus en el país se han cerrado 404 hoteles, pero 132 de ellos -con una capacidad de 7.000 camas- serán utilizados en caso de que crezca el número de infectados.
En Ecuador, el viceministro de Salud, Julio López, informó que hay 2.240 contagiados, 75 fallecidos y 3.257 casos sospechosos.
En la mayoría de la gente el nuevo coronavirus provoca síntomas leves o moderados que desaparecen en dos a tres semanas, pero en algunas personas, sobre todo los adultos mayores y quienes padecen trastornos de salud subyacentes, puede provocar enfermedades más graves e incluso la muerte./ AP