La actriz mexicana María Antonieta de las Nieves “La Chilindrina” vivió cinco meses de profunda tristeza luego del fallecimiento de su esposo Gabriel Fernández.
Visiblemente más delgada y con una actitud positiva, “La Chilindrina” fue abordada en el aeropuerto de la Ciudad de México y mencionó que el cariño de su familia y el apoyo incondicional que le brindaron durante estos meses fueron los pilares fundamentales para salir avante de este periodo durante el cual perdió 10 kilos de peso.
“Gracias a Dios no he necesitado de un tanatólogo, tampoco de un psiquiátra o de un psicólogo, hasta ahorita voy bien, nada más que me mareo mucho yo creo por la baja de peso y además por tanto medicamento que estoy tomando, porque si ya estaba tomando muchos, ahora estoy tomando más”, declaró. “La Chilindrina” sabe que este reinicio de labores será muy distinto a los demás, pues durante varias décadas trabajó y se trasladó a diferentes destinos en compañía de su marido.
“Yo pensé que no iba a salir adelante. Hasta la fecha, ahorita en la noche no pude dormir porque es la primera gira que voy sin él. Entonces va a ser difícil sin él”, reconoció.
Y aunque ahora su esposo ya no se encuentra a su lado, María Antonieta aseguró sentir su presencia todos los días y hasta “llenarlo de besos”, pues tiene su fotografía como salvapantallas en su celular.
“Lo he sentido, ha estado todo el tiempo conmigo. La gente debe pensar que estoy loca, mis hijos ya se acostumbraron. Yo le hablo y siento que me contesta”, dijo la mexicana que inició su carrera como actriz de doblaje. “Tengo un leoncito que compré, porque él decíá que era un león, y le pongo la mano y siento que él me da la mano. A diario lo besuqueo por el teléfono. Él sabe qué desayuno, qué como, sabe todo… llevamos una relación tan bonita, a pesar de que él esté allá y yo acá, nos comunicamos”.
Fuente: Infobae.con