El director en Francia de la marca de chocolate italiana Ferrero, Nicolas Neykov, aclaró que Kinder ha retirado más de 3.000 toneladas de productos.
Esto, a raíz del centenar de casos de salmonelosis detectados en Europa.
Esta intervención ha tenido un impacto financiero de varias decenas de millones de euros, según dijo Neykov al diario Le Parisien.
El dirigente se disculpa por las infecciones que han afectado desde mediados de abril a unas 150 personas, 81 de ellas en Francia, y principalmente a menores de 10 años.
«Es la mayor retirada de productos en los últimos veinte años y afecta a la marca favorita de los franceses», declaró el dirigente en su primera entrevista pública desde el inicio de la crisis.
El director de la compañía en Francia explicó que las primeras investigaciones apuntan a que la contaminación provendría de un filtro situado en un depósito de mantequilla en la fábrica de Arlon.
La actividad de la fábrica fue parada en abril y todos los productos que se habían hecho allí (Kinder Sorpresa, Schoko-Bons y más) fueron retirados.
Neykov precisó que han pedido reabrir el sitio a partir del 13 de junio para relanzar la producción cuanto antes.
A principios de mayo la compañía presentó un plan a las autoridades sanitarias.
Esto, para garantizar que 1.000 empleados trabajen siete días a la semana en la limpieza exhaustiva de unas 10.000 piezas de la fábrica.
En la entrevista del diario Le Parisien anunció además que la mitad de los controles sanitarios pasarán a ser realizados por una compañía externa.
El escándalo que ha afectado a Kinder le ha supuesto una pérdida de facturación del 40 % en el período de Pascuas.