El Juventus desperdició este martes una inmejorable oportunidad para sentenciar su noveno título liguero consecutivo. El club de Turín perdió 4-2 en San Siro contra el Milan pese a estar por delante 2-0.
La derrota sufrida el martes por el Lazio ante Lecce (2-1) ofrecía al Juventus la oportunidad de escaparse a diez puntos de distancia. Sin embargo, la desconcentración y tres goles seguidos impidieron dar el golpe definitivo al campeonato.
Sin el argentino Paulo Dybala, sancionado por acumulación de tarjetas, el Juventus salió con el también argentino Gonzalo Higuaín y Cristiano de titulares.
Los goles y la remontada
Juventus logró una primera hora de alto nivel, en la que consiguió una ventaja con goles del francés Adrien Rabiot y el portugués Cristiano Ronaldo.
Esos dos goles, y la prestación hasta ese momento sólida, hicieron creer al Juventus que el partido ya estaba cerrado. Sin embargo, el bajón de concentración fue castigado duramente.
Un penalti otorgado por el VAR por un toque con una mano de Leonado Bonucci fue transformado en el 62 por el sueco Zlatan Ibrahimovic. En los cuatro minutos siguientes, el marfileño Franck Kessié anotó el 2-2. Segundos después llegó la ventaja para Milan con gol del portugués Rafael Leao para el 3-2.
Posteriormente el brasileño Álex Sandro provocó el definitivo 4-2 del croata Ante Rebic.
Un duro golpe para Juventus
Hacía siete años que el Juventus no recibía cuatro goles en la Serie A, desde un revés 4-2 contra el Fiorentina de 2013. Los dirigidos por Maurizio Sarri no incrementaron el margen sobre el Lazio, pero mantienen los siete puntos de distancia.
Para el Milan fue el cuarto triunfo en los últimos cinco partidos y le permitió hacerse con la quinta posición en solitario.