El Gobierno de Italia debido a la situación que atraviesa el país involucró a los presos de varias cárceles para que ayudarán en la emergencia sanitaria.
El ministro de Justicia, anunció el sábado, que los privados de la libertad fabricarán hasta 400 000 mascarillas por día para frenar la propagación del COVID -19.
Mientras que otro funcionario reveló que los reclusos de tres centros penitenciarios de Roma, Milán y Salerno ya están colaborando en un proyecto de producción industrial de mascarillas con el objetivo de cubrir el déficit de los implementos sanitarios indispensables para atender la emergencia.
Asimismo, informó que los primeros insumos serán destinados a los propios reclusos y funcionarios de prisión. Y el resto serán distribuidos en distintos hospitales del país.
«Incluso los reclusos pueden contribuir a esta guerra, nos dan más fuerza para seguir adelante e intentar ganarla pronto», agregó el funcionario en rueda de prensa.
Italia es uno de los países más afectados por la pandemia, pese a que hoy registró la cifra más baja desde el 19 de marzo de fallecidos por coronavirus.