Las autoridades de Islandia han limitado desde este lunes las concentraciones públicas a un máximo de 20 personas .
Asimismo, han ordenado el cierre de bares, pubs, discotecas y gimnasios debido al aumento de nuevos contagios de COVID-19.
Se permitirán no obstante excepciones a ese límite de personas en las universidades, otros centros educativos y grandes establecimientos comerciales,.
Las piscinas funcionarán al 50 % de su capacidad y se mantendrá la regla de un metro de distancia social.
El uso de mascarilla será obligatorio, como hasta ahora desde que se introdujo en agosto en Islandia.
Las nuevas restricciones obedecen al aumento de los contagios registrado desde mediados del mes pasado
Esto ya que que se ha elevado a casi 160 nuevos casos por cada 100.000 habitantes las dos últimas semanas en Islandia
Gracias a una estrategia masiva de test y de rastreo de contactos, aparte de su situación geográfica y demográfica (una isla de unos 360.000 habitantes en el Atlántico norte), Islandia es uno de los países europeos que mejor ha controlado la pandemia.
Islandia solo ha registrado diez muertes por COVID-19, la última a mediados de abril, pero en las últimas semanas el número de hospitalizados ha subido a 15, tres de ellos en cuidados intensivos.
Este país nórdico exige desde agosto a todos los viajeros que lleguen a sus fronteras pasar un doble test de coronavirus o someterse a una cuarentena de 14 día