Este domingo, la rectora principal del sistema electoral venezolano, Tibisay Lucena, manifestó que a mayoría de las máquinas de votación del automatizado sistema electoral de Venezuela se quemaron en un «voraz incendio» que afectó a una instalación del órgano comicial del país.
«Se quemaron en ese incendio voraz (…) 49.408 máquinas de votación, 400 boletas electrónicas, 22.434 inversores de corriente, 127.000 membranas, es decir boletas (electrónicas), 49.323 sistemas de autenticación integrada, es decir las captahuellas», dijo la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE) en una comparecencia ante la prensa en la que no aceptó preguntas.
INCENDIO
El incendio se produjo el sábado en los galpones del CNE en Filas de Mariche, un territorio que hace parte del deprimido barrio de Petare, que alberga a una de las favelas más grandes de América Latina.
Lucena dijo que el fuego se propagó con rapidez y que en media hora ya estaba en los 6.000 metros cuadrados de la instalación, pese a que casi 60 personas entre bomberos, policías y trabajadores del CNE combatían las llamas.
También dijo que «fue poco lo que se pudo rescatar»: 562 máquinas de votación, 724 captahuellas y 24 servidores.
RESPONSABLES
La Fiscalía designó a dos personas para dirigir las investigaciones, pero de acuerdo con Lucena solo visitarán el sitio del suceso este lunes, más de 24 horas después del incendio.
Asimismo, dijo estar «a la espera de conocer» si el incendio se produjo por «un acto criminal», aunque ayer asomó que pudo ocasionarse luego de un sabotaje. Precisamente hoy, un presunto grupo armado que se identificó como Frente Patriota Venezolano asumió la autoría del suceso en un video divulgado en las redes sociales.
La presidenta del órgano electoral venezolano dijo, además, que el CNE tiene «la capacidad y el talento humano» para sobreponerse a «cualquier adversidad» y garantizó que los comicios previstos para este año, cuando se renovará el Parlamento -que controla la oposición-, se realizarán a tiempo.