Los hospitales de Quito trabajan al límite de su capacidad para atender a los pacientes. Los directores temen que con el cambio de semáforo se registre un desbordamiento.
Daniel Calderón, gerente general del Hospital del IESS Quito Sur, uno de los más grandes de la capital, confirmó que la capacidad de pacientes en este centro está al límite.
Los centros móviles en el exterior, donde residen a pacientes con sintamotología leve de COVID-19 se ha visto en la obligación de implementar más camas
Calderón manifestó que han incrementado 20 camas más para poder resistir la baja de pacientes a las carpas militares.
En esta misma situación se encuentran los otros hospitales de la capital. Sin embargo, la colaboración de los centros de salud han sido importante para que no haya desbordamiento hasta la fecha.
El directo del hospital temporal del Bicentenario, Javier Salgado, cuenta que, desde el 15 de mayo hasta la fecha, han recibido a 31 pacientes con COVID-19 derivados de varios hospitales de la ciudad.
«Lo que hacemos es recibir pacientes leves o moderados de COVID-19, para poder desalojar camas que puedan servir para pacientes que requieren un tratamiento más critico», añadió Javier Salgado.
Hospitales de Quito trabajan al límite de su capacidad. Por ello la preocupación se centra en el cambio de semáforo a amarillo donde se flexibilizarán las medidas y el contagio puede ser mayor.
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