En Estados Unidos dos hermanas decidieron rendirle un homenaje a su padre que murió víctima del covid-19, tatuándose una nota escrita que dejó el hombre antes de morir.
Se trata de las hermanas Anna Harp, de 27 años y Abrielle Clausing, de 21, que perdieron a su padre el pasado 13 de enero y decidieron grabar el último escrito en su piel
Según el medio estadounidense Good Morning America, su padre padecía una enfermedad pulmonar hereditaria, por lo que se cuidaba del covid-19, siguiendo de manera muy rigurosa las medidas de bioseguridad
A pesar de los cuidados, Rudolph se contagió de esta enfermedad y su cuadro se complicó , entrando y saliendo del hospital durante dos meses.
Sin embargo, la lucha constante para mejorar su estado de salud no superó el virus y sus pulmones dejaron de funcionar
Cuando los funcionarios del hospital en donde se encontraba internado, le permitieron a la familia despedirse de su padre encontraron una nota que él escribió como pudo desde su cama con la frase : «It has been such a good life” (Ha sido una vida tan buena).
Las jóvenes decidieron tener plasmadas esas palabras en su cuerpo para toda la vida , una de ellas lo hizo con la misma letra de su padre y la otra modificó la forma.