Los cadáveres de ocho hombres y una mujer fueron hallados el lunes en una camioneta de carga en una ciudad de Michoacán, un estado del suroeste de México donde se han intensificado la violencia y la actividad de distintos grupos del crimen organizado.
El hallazgo de los cadáveres, que aún no han sido identificados, tuvo lugar en la localidad de Zitácuaro, indicó la fiscalía estatal en un comunicado. Tenían heridas aparentemente de arma de fuego.
Las autoridades no comentaron sobre el posible móvil.
Zitácuaro está unos 150 kilómetros al oeste de la Ciudad de México y lejos de la zona de Michoacán en torno al municipio de Aguililla, el cual está en el centro de la disputa entre el Cártel Jalisco Nueva Generación y el grupo conocido como Cárteles Unidos, al que se integraron criminales procedentes de antiguos grupos locales.
En esa área se atacó a las fuerzas de seguridad incluso con drones cargados de explosivos.
No obstante, todo el estado está inmerso en esa guerra entre organizaciones delictivas que se dedican a actividades de narcotráfico, extorsión, robo y secuestro de empresarios y productores, lo que ha obligado a decenas de familias a desplazarse, según han reportado organizaciones locales de defensa de los derechos humanos.