Zlatan Ibrahimovic dijo la temporada pasada que si hubiera estado con el Milan desde el principio, los Rossoneri habrían conquistado el título de la Serie A. Esta campaña podría dársele la razón.
Muchos se burlaron de las declaraciones de Ibrahimovic en julio, pese a que el sueco las hizo después de una extraordinaria victoria de 4-2 sobre la Juventus, considerándolas otro disparatado comentario más del franco delantero.
El Milan había pasado varios años de confusión, con dos cambios de dueños y sin terminar una temporada más arriba que el quinto lugar en la tabla de la liga italiana desde 2013.
El club ocupaba el 12do puesto cuando Ibrahimovic regresó al club en enero, ocho años después de que su partida —y las de otros— detonaron un desplome en espiral.
El Milan actualmente tiene una ventaja de dos puntos en el liderato de la liga y no ha perdido en la Serie A desde marzo, en su último encuentro antes que la pandemia de coronavirus causara la suspensión de partidos.
Cuando el fútbol reanudó sus encuentros, los Rossoneri iniciaron una racha invicta de 23 juegos a la que el club francés Lille puso fin el jueves en duelo de la Liga Europa.
Gran parte de ese logro se debe a Ibrahimovic, que ha anotado 18 goles en la liga desde su retorno, incluyendo ocho en cinco actuaciones esta temporada para encabezar la tabla de goleo italiana.
Ibrahimovic firmó un nuevo contrato por un año con el Milan en agosto y el director deportivo Paolo Maldini, exdefensor de los Rossoneri, dijo recientemente que el club está listo para negociar una extensión de ese contrato.
“Ibra es especial sin duda”, afirmó Maldini.
Ibrahimovic anotó de nuevo el domingo para rescatar un punto para su equipo con un remate de cabeza en tiempo de reposición en el empate de 2-2 ante Hellas Verona.
Su racha goleadora es aún más impresionante si se toma en cuenta que Ibrahimovic cumplió 39 años el mes pasado. Ha mostrado pocas señales de su edad, y él asegura que no lo siente.
“Me siento como un niño, quiero jugar”, declaró. “Podría ser lo opuesto, que ya no pudiera jugar, así que esto es mejor”.
Ibrahimovic se convirtió en el tercer jugador del Milan en anotar en siete juegos consecutivos de la Serie A.
“Uno siempre necesita tener objetivos. No jugamos porque sea divertido, aunque sí lo es, sino que se necesita tener objetivos. Al menos esa es mi filosofía”, subrayó.