A través del decreto ejecutivo 1158, el Gobierno liberó la importación de combustibles para el sector privado. Hasta ahora solo la empresa pública Petroecuador tenía el monopolio de la compra y venta de derivados.
En un plazo de 120 días se pueda importar sin restricciones gas industrial y derivados destinados a nueve sectores económicos, así lo informó este viernes la Secretaría General de Comunicación de la Presidencia.
La nueva medida no afectará al precio del gas de uso doméstico. En tanto que el coste de la gasolina extra y diésel seguirán fijándose en virtud de un sistema de bandas.
El decreto autoriza a la empresa privada a importar sin restricciones gas industrial y natural, gasolinas, diésel, jet fuel, avgas, absorbentes y otros combustibles para uso industrial, comercial, naviero y aéreo, entre otros.
EL OBJETIVO DE LA MEDIDA
El propósito de la medida es que las compañías privadas «asuman progresivamente los costos de importación de derivados. Y, de esta manera, el país cuente a futuro con combustibles bajo la Norma Técnica de Emisiones Euro V y de la OMI 2020».
El Ministro de Energía, René Ortiz, indicó que quedan congelados los precios del gas licuado de petróleo (GLP) para uso doméstico, agrícola o vehicular.
«Es decir, se mantiene focalizado el GLP en cilindros que usan los hogares. Así como, el GLP para vehículos de transporte público de taxistas legalmente organizados. Y el GLP destinado al secado de productos agrícolas como maíz, arroz y soya», precisó.
El decreto permite la importación de combustibles actuales y nuevos por personas naturales o empresas nacionales o extranjeras, legalmente establecidas en el país, bajo la norma de calidad INEN.
El Ejecutivo ecuatoriano busca con la decisión garantizar la calidad de los derivados de los combustibles empleados en el país.
TARIFARIO PARA IMPORTADORES
Para ello, la Agencia de Regulación y Control de Energía y Recursos Naturales No Renovables debe establecer un tarifario para que los importadores utilicen las instalaciones de las empresas públicas del sector hidrocarburífero a fin de que puedan almacenar, transportar y despachar los derivados importados.
Además, esa Agencia será la encargada de realizar «el control y las acciones correspondientes con el propósito de que las compañías abastecedoras y comercializadoras, públicas y privadas, garanticen la demanda y normal abastecimiento de los derivados de hidrocarburos, a escala nacional».
El comunicado oficial recalca que las gasolinas extra y ecopaís y el diésel 2 y premium para los segmentos automotriz, camaronero, pesquero y atunero «se mantienen bajo el sistema de banda de más/menos el 5 %, que garantiza que la fluctuación en los valores de los derivados sea en apenas centavos, lo que protege al consumidor final».
La liberalización de las exportaciones de combustibles y gas para el sector privado supone un nuevo paso encaminado a desregular el sector.
Más detalles en el siguiente video: