El gobierno de la presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, presentó el jueves una nueva denuncia contra el expresidente Evo Morales, esta vez, por estupro y trata y tráfico de personas.
La noticia se dio a conocer en conferencia de prensa por el viceministro de Transparencia, Guido Gustavo Melgar.
El caso salió a la luz después de una investigación de la policía que inició en julio, cuando vecinos denunciaron que vieron cargar gasolina a un auto oficial de la gobernación de Cochabamba, al centro del país, el cual había sido reportado como robado. En ese entonces la policía detuvo a los ocupantes, entre ellos una joven de 19 años –supuesta pareja de Morales– y a su hermana junto con un conductor.
“La policía hizo el vaciado del celular y encontró mensajes por Whatsapp, fotos, entre esta señorita y Juan Evo Morales Ayma”, mencionó Melgar. Agregó que, según la denuncia, la joven acompañaba a Morales en partidos en diferentes lugares del país de fútbol cuando él era presidente y “ella era aún menor de edad”.
The Associated Press no publica los nombres de víctimas de abuso sexual a menos que éstas hagan su caso de conocimiento público.
En la víspera, el viceministro de Justicia y Derechos Fundamentales, Huberth Vargas, aseguró a periodistas que el “Ministerio de Justicia ha recibido denuncias anónimas” de otras menores.
Morales, cerca de cumplir 60 años, suma una cuarta denuncia después que renunció a la presidencia en noviembre del año pasado tras una crisis política y social que dejó 36 fallecidos por unas fallidas elecciones manchadas por denuncias de fraude.
El exmandatario tiene querellas abiertas por fraude electoral, terrorismo y sedición y —debido a que se le señala de estar detrás de protestas que provocaron bloqueos y afectaron el manejo del gobierno de la pandemia del coronavirus— daño a la salud.