Emblemas gastronómicos que no pueden faltar por las fiestas julianas de Guayaquil

La gastronomía es una pieza fundamental en la celebración de las fiestas julianas de Guayaquil. La afluencia en los restaurantes que venden encebollado y caldo de manguera crece cada día.

Para los guayaquileños es difícil decidir entre estos emblemáticos platos. Para Galo Hidalgo, asiduo comensal de la comida típica de la ciudad, es imposible. Come un plato de encebollado con chifles, pero duda al tener que elegir entre ese o un plato de caldo de salchicha.

Hace más de 70 años se come encebollado en Guayaquil. En una de las picanterías más concurridas, se sirve con «hierba y cebolla para darle sabor», comentó Noemí Vélez mientras servía un plato tras otro.

El ingrediente principal del encebollado es la albacora. Una fuente importante de fósforo que, según Carlos Barberán, comensal del platillo, «te recupera de todo».

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Pero el caldo de salchicha no se queda atrás. Los clientes que lo tienen entre sus favoritos lo disfrutan a toda hora. Con limón y verde es un deleite para los guayaquileños que lo ubican como un emblema de la Perla del Pacífico en sus fiestas, y en todo el año.

Bélgica de Vargas prepara caldo de salchicha hace varias décadas. En su local se prepara este platillo desde las 23:00 de la noche previa.

Ella explica que lo primero es cocinar las vísceras y formar el caldo. Luego, cerca de las 04:00 de la mañana se inicia con la preparación de las morcillas con arroz, ajo y otras especias.

No importa cuál sea el preferido, pero seguro estos platos típicos serán, una vez más, aclamados por los guayaquileños en las fiestas julianas.

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